El cumplimiento legal por medio del Sistema de Administración de Responsabilidad Integral (SARI)
19nov.
El pleno y eficiente cumplimiento de los requisitos legales y normativos permite asegurar la continuidad operativa de todo negocio. Su correcta ejecución también ayuda a evitar multas administrativas y, en el peor de los casos, un cierre de operaciones. Para lograr esto, la etapa de identificación es fundamental.
Es por eso que el SARI, a través de su práctica administrativa número 12 del protocolo, denominada “cumplimiento legal”, orienta, mediante sus reactivos, a identificar las obligaciones que regulan las operaciones de las distintas unidades de negocio. Promueve su revisión periódica y determina el nivel de desempeño en el cumplimiento.
Mediante procesos de verificación, el SARI permite identificar otros aspectos relevantes, entre los que se incluyen:
- Registros obsoletos.
- Limitación en el alcance normativo.
- Falta de continuidad en el plan de acción.
- Falta de comunicación interna.
- Incongruencia entre procedimiento y aplicación real.
Dado que esta situación puede representar un riesgo potencialmente alto, no solo en el impacto de las evaluaciones y su certificación, sino también en la continuidad de las operaciones, a continuación, se presentan algunas recomendaciones a considerar:
- Integración de una sola matriz que englobe todas las dependencias y el marco normativo.
- Designación de actividades a las diferentes áreas administrativas.
- Asegurar la objetividad en la evaluación del grado de cumplimiento.
- Promover una comunicación interna efectiva.
- Revisión e involucramiento continuo de la alta dirección.
- Resaltar el impacto económico.
Actualización del personal registrado en las comisiones de trabajo de la ANIQ.
Para más información sobre esta práctica y otros temas relacionados con el Sistema de Responsabilidad Integral, contacte a:
Néstor Garrido: ngarrido@aniq.org.mx
Lizbeth Hernández: lhernandez@aniq.org.mx
Denise Rivera: drivera@aniq.org.mx